Los mándalas de estrellas pueden usarse para decorar espacios o como objeto de contemplación para ingresar a la meditación.
Para recibir los beneficios de los mándalas de estrellas sólo es necesario dibujarlos, contemplarlos, colorearlos o meditar con ellos.
Meditar con estos diseños permite ingresar en un espacio asombroso y de conciencia, que nos lleva al propio interior.
Esta conexión posibilita la unión real con el cosmos que constituimos.
Los mándalas de estrellas se convierten en la guía para centrarnos e integrar los diversos aspectos de nuestra vida y ayudan a vencer la impresión de disgregación que se siente en la sociedad actual.
El trabajo con mándalas de estrellas puede radicar en la observación, en el dibujo o en la pintura de los mismos.
Cuando la persona decide pintar mándalas de estrellas, debe elegir un diseño que le agrade o lo asombre y buscando un lugar calmo, con lápices, marcadores o acuarelas, pintar el dibujo de adentro hacia afuera para exteriorizar las emociones y de afuera hacia adentro si el propósito es conectarse con el interior.
Lo importante es elegir los colores con el corazón, sin pensar.
Significados de los mandalas de estrellas
Otra función de los mándalas de estrellas es obstaculizar energías negativas. Para este fin hay que ubicar las imágenes como objeto decorativo en las habitaciones del hogar.
Hay una concepción sobre mándalas que determina que todo en el cosmos es geometría y que las personas somos mándalas en vibración interactuando con los otros.
La estrella es el símbolo de la verdad, el espíritu y la esperanza.
Su naturaleza noctámbula personifica la batalla en contra de las energías del lado oscuro y de lo desconocido. También simbolizan el orden y el destino según la Astrología.
En el tarot, la estrella personaliza la esperanza y la unión del espíritu y de la materia.
Estrella de 6 puntas
Las estrellas son muy importantes en la historia de la humanidad.
Actualmente es un distintivo universal del judaísmo y de la identidad de los judíos.
La estrella judía de seis puntas o hexagrama, está formada por dos triángulos equiláteros entrelazados.
La cultura judía considera que esta estrella es un amuleto mágico de buena suerte y además es usada desde hace siglos como un símbolo laico de identidad judía.
